domingo, 26 de octubre de 2014

PROVINCIA DE CÁDIZ EN 8 DÍAS

DÍA 1. 


Por la mañana hemos aprovechado la playa y ya por la tarde hemos ido hasta El Rocío, un pelín lejos desde la ciudad de Cádiz (unas 2 horas de coche) ya que debido a Doñana y al río Guadalquivir no se puede cruzar, si no que hay que ir hasta Sevilla y desde ahí bajar hasta la provincia de Huelva. A mí personalmente El Rocío me ha gustado y sorprendido a la vez por lo siguiente. Las casas son todas bajitas iguales, las calles están sin asfaltar y si no es época de romería es un lugar absolutamente vacío sin apenas siquiera turistas, bares cerrados y eso sí una forma inmejorable de ver su ermita con su precioso retablo y muy blanca. El paisaje de El Rocío deja además una estampa preciosa con Doñana de fondo. De regreso a Cádiz hemos parado en Sanlúcar de Barrameda para cenar en La Lonja sus famosos langostinos.

DIA 2.

Por la mañana hemos aprovechado para quedarnos en la playa de La Cortadura de Cádiz, inmensa. Ya por la tarde hemos después de comer hasta Sanlúcar de Barrameda, al P.N. de Doñana. Desde el embarcadero hemos salido a las 16:45 a coger el barco que durante 1 hora ha navegado por el Guadalquivir, después nos hemos pasado media hora en el parque natural donde había caballos y vacas salvajes y por supuesto aves. Hemos vuelto al barco y hemos llegado hasta la otra orilla del río Guadalquivir muy ancho por aquí y salado hasta 50 km antes de su desembocadura y hemos bajado en la parte del P.N. de Doñana que no es lo mismo que natural, cosa que yo al menos desconocía hasta el día de hoy. Bueno pues esta parte es mucho más verde y aquí hemos andado por sus caminos entre ellos parte de uno de los de El Rocío, hemos llegado hasta un observatorio donde hemos podido ver a lo lejos ciervos, gamos y jabalíes. Había además muchos mosquitos. Hemos cogido desde ahí de nuevo el barco y después de 3 horas y media como estaba previsto llegábamos otra vez hasta Sanlúcar. Ya hemos aprovechado el resto de la tarde para pasear por Sanlúcar, un pueblo que huele todo a vino debido a sus numerosas bodegas, hemos visto el Castillo de Santiago, su playa y una vista general hasta acabar cenando en Bajo de Guía. 

DÍA 3.

Por la mañana un poquito de playa con un largo paseo y con mucha afluencia de gente, a pesar de ello, la inmensa playa de la ciudad de Cádiz nunca creo que pueda llegar a estar saturada. Después de comer, y dormir un rato la siesta, y con toda la tarde por delante hemos empezado nuestra visita a la ciudad, llegando primero hasta la Plaza de España, en esta plaza hay un monumento a las Cortes de Cádiz de 1812. Desde Plaza de España, andando, hemos recorrido todos los lugares importantes de la ciudad, El Baluarte, su preciosa bahía desde la que se pueden ver los pueblos de Rota, Puerto de Sta. María, etc. De ahí, a través de calles estrechas y muy largas hemos llegado hasta el teatro de Falla con una preciosa fachada de estilo mudéjar. A través de la calle Sacramento hemos subido a la Torre Tavira donde está situado lo que se llama cámara oscura, un efecto óptico que te permite ver todos los rincones de la ciudad de Cádiz en directo, con el mar, coches y personas en movimiento. Desde aquí hemos continuado hasta el Oratoria de Felipe Neri donde se encuentra la plaza recordatoria a las Cortes de Cádiz de 1812. También hemos recorrido la Plaza de las Flores, y La Catedral. Para terminar la tarde hemos ido a tapear por la calle de La Palma, por su famosísima Casa Manteca y terminar cenando en el Balandros. 

DÍA 4.

Por la mañana hemos ido hasta la ciudad de Jerez, a unos 25 km de Cádiz, Hemos ido primero hasta La Cartuja, preciosa por fuera, bien cuidada y silenciosa por dentro, bueno hasta donde nos han dejado meternos o más bien nos hemos colado pues en su interior hay monjes de clausura y su visita está prohibida. Después hemos recorrido su catedral, su alcázar, la iglesia de San Miguel, etc. Justo antes de comer por el centro de Jerez, hemos ido hasta la Real Escuela Ecuestre, muy bonita en su exterior y también en el interior, donde hemos comprado entradas para ver el precioso espectáculo de "Cómo bailan los caballos andaluces". Por la tarde, hemos entrado a hacer la visita al una de las bodegas más famosas de Jerez, la de Gonzales Byass o más conocida como la de El Tío Pepe. En su interior, visitándola, hemos estado casi dos horas , contándonos la historia de la bodega, los cultivos, y su parte de zona museo. 

DÍA 5.

La excursión del día de hoy era un poquito más larga, más que nada porque nos hemos ido después de desayunar hasta el pueblo de Ubrique, tierra famosa no por su torero si no por sus pieles. Allí, hemos recorrido su Avenida de España, entrando a numerosas tiendas de bolsos y zapatos. También ya desde el principio del día hemos podido descubrir cómo es cierto que hoy nos encontramos realizando la llamada ruta de los Pueblos Blancos, pues todas sus casas y por tanto la vista general del pueblo es un color blanco sobre un fondo verde de campo y monte. Desde Ubrique y por carreteras muy montañosas, curvas y estrechas llegábamos a la hora de comer a Ronda ya en la provincia de Málaga. Hemos comido en un chiringuito de un parque céntrico y hemos después aprovechado para pasear por este maravilloso pueblo andaluz. Entramos a visitar la plaza de toros, una de las típicas y originales con el museo taurino en su interior y después nos hemos dirigido hacia su espectacular puente de gran altura. Nos hemos marchado de Ronda después de un buen café a media tarde con dirección a Grazalema, de nuevo mala carretera y algo inesperado, la lluvia, aunque después hemos descubierto que curiosamente Grazalema es el pueblo de España donde más llueve, cualquiera lo diría estando en Andalucía!!! Así que una vuelta rápida y de nuevo al coche, bajando por la carretera que da al pueblo de El Bosque con fuerte lluvia y nubes agarradas a las montañas donde apenas se veía. Hemos continuado camino de vuelta, parando en el pueblo de Arcos de la Frontera, ya sin lluvia y con muchos turistas hemos bajado a dar un paseo por el centro, para terminar el día cenando en San Fernando antes de regresar de nuevo a la ciudad de Cádiz. 

DÍA 6.

Mañana hoy de playa de La Cortadura - Victoria. Ya por la tarde, hemos cogido el coche hasta llegar Rota. Después de un pequeño paseo y mucho militar americano por sus calles, hemos ido hasta Chipiona, con el Santuario de La Virgen de Regla y su faro ambos en el paseo marítimo y para acabar la tarde, ya de vuelta, hemos parado en El Puerto de Sta. María, donde hemos visitado su también famosa plaza de toros ovalada e histórica, para terminar cenando en El Romerijo y "poscenando" en sus bares. 

DÍA 7.

Hoy no hemos ido a la playa de Cádiz, sino que hemos recorrido algo más de 1 hora en coche hasta llegar a Tarifa. Tras dar una vuelta por su centro, hemos ido hasta la Playa de Bolonia, famosa tanto por sus dunas como por sus ruinas romanas, visitando antes de darnos un baño, el Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia. Allí mismo hemos comido y después por la tarde nos hemos ido hasta la Playa de Valdevaqueros, playa natural, con mucho surfero y un chiringuito perfecto para tomarse algún cóctel, "El Tumbao". Después de pasar la tarde, hemos regresado a Cádiz por la carretera de la costa, parando en Zahara de los Atunes, y Barbate

DÍA 8.

Por la mañana volvemos a disfrutar de la playa de La Cortadura. Es ya por la tarde cuando hemos cogido el coche y hemos ido hasta Medina Sidonia, un pueblo con muchos restos arqueológicos tanto romanos como árabes y con calles empinadas y edificios blancos. Desdes Medina Sidonia, hemos ido hasta Vejer de la Frontera, pueblo que estaba en fiestas y cuya vista desde la propia carretera con su muralla de fondo en lo alto es quizás más bonita que su propio interior. Como estaba en fiestas, hemos tenido que dejar el coche aparcado bastante lejos del centro y hemos tenido que subir sus cuestas unos 3 km. Tras dar una larga vuelta por Vejer, hemos acudido hasta Caños de Meca y a la vuelta terminar la tarde dándonos un baño en Sancti Petri y cenar por allí. 














TETUÁN Y TÁNGER CRUZANDO DESDE ALGECIRAS EN 1 DÍA

Hemos partido temprano desde la ciudad de Cádiz donde nos alojábamos, a las 6:00h y en aproximadamente 1 hora y 45 minutos hemos llegado al puerto de Algeciras. Allí hemos buscado el stam de Eurotras, con quien el día anterior habíamos hecho la reserva de la excursión, para recoger nuestros billetes con destino a Ceuta. Unos 50 minutos de trayecto en barco a pesar de que dicen que se tarda 35, y llegada a Ceuta. Allí nos esperaba, en el mismo puerto de Ceuta, con su chilaba puesta nuestro guía marroquí. Cogemos un autobús y abandonamos Ceuta, España y en definitiva el mundo occidental para descubrir desde la misma frontera en el ya lado marroquí un nuevo mundo, dos horas menos y una enorme sorpresa que nos llevaríamos del día de hoy. 

Ya en el autobús carretera de tres carriles, el central para que adelanten tanto los de una dirección como otra, vemos cómo la gente cruza a pie cargados de bolsas y sacos, a través del monte que te adentra en la ciudad Ceutí. Así llegamos hasta la antigua ciudad española de Castillejo, desde donde partieron las tropas de Franco en la guerra civil y continuamos camino dirección a Tetuán. En mitad del trayecto, no sabría muy bien decir dónde nos para el autobús en un centro de camellos o dromedarios porque me debieron explicar la diferencia varias veces pero siempre se me olvida, y allí nos montaron cada uno en uno a dar vuelta por una especia de campo-desierto durante media hora. 

Después de esta parada, continuamos hasta la ciudad de Tetuán, y aquí ha empezado el verdadero conocimiento de Marruecos. Hemos recorrido su zoco (mercado) con calles sucias, estrechas, vendiendo frutas, bollos típicos marroquíes de almendras, cacerolas viejas, mandos de tv, zapatos usados, todo junto, puesto con puesto, como el que saca de casa y lleva al zoco lo que tiene posibilidad de vender. Se veía realmente pobreza. Los niños andando por el zoco muchos de ellos descalzos pidiendo dinero a los turistas, las mujeres por supuesto todas con velo, los hombres con chilaba, policías armados en medio del zoco y muchos vendedores intentando vender algo a los turistas mediante regateo persiguiéndote durante todo el recorrido, por cierto, si no vas con guía, no es difícil perderse dentro del zoco debido a su recovecos y lo grande que es. 

A la salida del zoco, vamos hacia la Plaza de España de Tetuán, realmente bonita y muy cuidada, y desde allí, paseando por el centro de Tetuán hasta llegar al restaurante incluido en la excursión contratada. Un restaurante típico marroquí, con comida típica marroquí, muy decorado por dentro y con bailes y música típicos. Por supuesto nos han dado de comer cus cus, cordero, pastel de almendras y té. Después de comer hemos ido hasta una casa turística típica marroquí del centro de Tetuán, donde fabricaban alfombras, y con tal de vendernos nos han llegado a enseñar sin duda más de 50. También hemos visitado una farmacia antigua, con cientos de aromas, a las que por cierto huelen todas las calles de Tetuán. 

Desde Tetuán, 1 hora de viaje por carreteras malísimas hasta Tánger en donde de nuevo su mercado parecido al de Tetuán y con muchos hombres persiguiéndonos para intentar vendernos cualquier cosa al precio del regateo acordado. Hemos visto en Tánger las playas de la costa marroquí, a lo lejos y de fondo las costas españolas, además también nos han llevado hasta la construcción del puerto de Tánger y tras un paseo por el centro de la ciudad, hemos cogido de nuevo el autobús y esta vez por la carretera de la costa, no mejor que la otra, hemos llegado de nuevo a la frontera española con Ceuta. De nuevo barco para cruzar el estrecho y llegada a Algeciras. 

miércoles, 22 de octubre de 2014

CANTABRIA EN 4 DÍAS

PRIMER DÍA


Salimos de Madrid con una fuerte lluvia y a donde primero nos dirigimos es a Fuente Dé donde hay un teleférico que sube hasta lo alto para poder ver el valle. Es hora de comer cuando llegamos así que es lo primero que hacemos. Sobre las cuatro de la tarde decidimos subir al teleférico pero nos dicen que la cola de espera puede ser de hasta 2 horas. Nos parece demasiado tiempo y nos vamos directamente hacia Liébana. Besamos la cruz, parte de la misma donde crucificaron a Cristo y cogemos el coche para ir hasta el pueblo de Potes. Pueblo de casas de piedra, agua, verde y típico pero mientras estamos paseando por sus calles la lluvia es cada vez más y más fuerte y nos marchamos de camino a Santander. Nos alojamos en el hotel y nos vamos a cenar a la zona pesquera de Santanter al restaurante "Los Peñucas".


SEGUNDO DÍA

Después de desayunar en el hotel, nos vamos hacia el pueblo de Comillas. Sin parar de llover en lo que llevamos de viaje, visitamos el Palacio de Sobrellano, y paseamos por los alrededores del Capricho de Gaudí. Después, con el coche subimos hasta la Universidad desde donde se observa en la parte trasera una maravillosa vista del mar Cantábrico. Desde Comillas, continuamos camino hasta San Vicente de la Barquera, donde comemos y damos una vuelta por los soportales. Ya por la tarde nos vamos hacia Santillana de Mar y personalmente éste me parece uno de los pueblos más bonitos de España, con sus calles empedradas, sus casas también de piedra y un toque de paisaje verde dejan simplemente un paisaje admirable. A la vuelta cenamos en el centro de Santander.



TERCER DÍA

Nada más levantarnos hemos acudido hasta Santoña para iniciarnos en el deporte de la vela en la escuela náutica de Santoña. Allí hemos hecho un curso de 2 horas y después una navegación básica de otras 2 horas. Para comer nos hemos ido hasta Laredo, apenas a 10 minutos en coche y ya por la tarde hemos vuelto a Santander para visitar la ciudad, con la playa de El Sardinero, el pequeño zoo que hay entre ésta y el Palacio de la Magdalena y finalmente las vistas desde éste para terminar la noche cenando en el centro de Santander.


CUARTO DÍA

Hoy hemos madrugado sobre las 7:30 h para ir a hacer la actividad del descenso del río Deva y con mochila en la espalda nos adentramos en Asturias donde hemos ido hasta el pueblo de Panes, desde donde después de la recogida de chalecos, remos y canoas hemos iniciado el descenso. Después de tres horas de remar sin parar y con un río con bastante corriente en esta época del año y con tramos estrechos en el que hemos tenido que ajustar la canoa, los brazos se notaban ya cansados. Hemos acabado además mojadísimos y a pesar de que hoy hacía muy buen día cuando venía aire hemos pasado frío. Hemos parado a comer en mitad del recorrido el típico picnic que te da la agencia de la excursión y hemos continuado río abajo hasta el pueblo de Unquera donde nos hemos cambiado de ropa y hemos merendado junto al río. Desde ahí a media tarde vuelta a Santander.